Consejos para los animales y las plantas

Las alteraciones geofísicas provocadas por corrientes de agua subterráneas, fracturas geológicas etc afectan a la mayoría de los animales de la misma manera que en el ser humano. Si obligamos a cualquier animal tanto si es doméstico como de granja a estar sobre una alteración telúrica, lo más seguro es que se ponga enfermo, infecciones, reumatismo, parálisis, ceguera, nerviosismo, anemia, anorexia, inflamación de las articulaciones y debilitamiento general son las afecciones más características en estos casos. 

Los animales libres no tienen problema ya que su instinto les indica cuáles son los lugares que deben evitar. 

 

Los perros difícilmente se estirarán en una zona alterada, y si los obligamos a estar actuarán con nerviosismo y ladrando continuamente sin razón aparente, además su estado físico se irá deteriorando paulatinamente. 
De todas formas muchos animales de compañía con una vida sedentaria y en lugares cerrados acabarán por perder la capacidad instintiva para reconocer los sitio alterados.

Normalmente los pájaros tampoco suelen hacer sus nidos sobre una zona alterada. 
En cambio los gatos y los felinos en general prefieren los puntos con fuerte radiación telúrica, pero no hay que fiarse de donde se coloque un gato que tengamos en la casa, ya que si hace muchos años que está haciendo vida sedentaria habrá perdido la capacidad y no nos servirá como indicador infalible de los sitios perjudiciales. 
También las hormigas suelen hacer sus nidos en lugares de gran alteración, sobre todo en fracturas, fallas geológicas y sobre venas de agua subterránea sobre todo allí donde coincidan con un cruce de líneas Hartmann o Curry. 
Los nidos de abejas también se encuentran con mucha frecuencia en lugares alterados, si los criadores de miel pusieran panal donde las abejas ponen la miel, en lugares de fuerte radiación, rápidamente notarían la hiperactividad de las abejas que pondrían el triple de miel que si estuvieran en zona neutra.

Las plantas tanto de interior como de exterior, en general también son sensibles a los campos magnéticos terrestres, y si las colocamos encima de una perturbación telúrica acabarán por morirse, al igual que las vallas o setos que ponemos para delimitar un jardín, es fácil ver donde hay una zona perturbada ya que los "setos" o setos que hayan plantados sobre la alteración no habrá manera de que vivan y si lo conseguimos siempre serán de tamaño muy inferior y débiles los que hay plantados en zona neutra.